A falta de otro número redondo, tengo que conformarme con los 20.000 spams del título. Sí, me hubiera gustado celebrar algún otro éxito indiscutible del blog, como, por ejemplo, las veinte mil entradas, los veinte mil visitantes, los veinte mil comentarios, las veinte mil citas, pingbacks o trackbacks. Y si no fuera en el blog, en otro ámbito cualquiera: veinte mil días vividos (que equivalen a unos 54 años y pico), veinte mil leguas de viaje submarino, un premio en la lotería de veinte mil euros, qué sé yo.
Pero lo cierto es que no tengo ninguna cifra semejante que celebrar. Lo único que puedo destacar en el orden de magnitud de cinco cifras es que el plugin Akismet ha interceptado a lo largo de esta mañana el comentario basura número 20.000, cifra escandalosa donde las haya si se compara con los comentarios legítimos que orgullosamente acumula La Bitácora del Tigre: 740 en el momento de escribir estas líneas. Seguro que cuando leáis la entrada la cifra habrá aumentado; el número real de spams interceptados por Akismet puede verse en la parte inferior de la barra lateral del blog.
En realidad la desproporción es todavía mayor, porque de esos 740 comentarios habría que descontar los 222 en los que yo he respondido a mis comentaristas y los 66 pingbacks o referencias mutuas de las diversas entradas que componen el blog (son datos que extraigo de la sección de estadísticas de la bitácora gracias al plugin WP-Stats). Quedan, pues, 452 comentarios, lo cual supone una proporción de más de 44 a 1 a favor del spam. Desolador.
Pero como dice el refrán, el que no se consuela es porque no quiere. Cuatrocientos cincuenta y dos comentarios de ciento cincuenta entusiastas comentaristas no son para echar en saco roto. Cada comentario legítimo vale por una miríada de spams, y eso es lo que hay que tener en cuenta. Además, dicen los que saben que a los spammers les compensa su labor si tienen éxito en uno de cada millón de envíos basura que realizan, y La Bitácora del Tigre todavía está lejos de esa cifra mágica. Seguiremos resistiendo mientras el cuerpo y Akismet aguanten, o mientras este magnífico plugin para WordPress (imprescindible a pesar de sus idiosincrásicos parones) no se convierta en un producto de pago.
corsaria dice
Eso viene a ser un 96.3% de spam y un 3.7% de comentarios legítimos. Ufff… esto del spam cada vez peor. Al menos akismet lo ha capturado. :-)