En la entrada del 10 de agosto me referí a la activación de una cuenta de Google Analytics para La Bitácora del Tigre. He dejado pasar todo este tiempo, apenas sin consultar el servicio, para contar con datos significativos sobre el tráfico que genera mi blog.
Los resultados no son ni espectaculares ni sorprendentes, pero sí lo es la cantidad y profundidad de la información que brinda Google Analytics sobre el particular: un verdadero océano de gráficos, estadísticas, cálculos y proyecciones, con el que cualquier bloguero se puede plantar, hinchado como un pavo, ante amigos y conocidos. El caudal de información es exhaustivo, omnicomprensivo, rotundamente abrumador.
Y, bueno, alguna sorpresa sí que hay. Por ejemplo, la de comprobar que los visitantes de la bitácora se reparten mucho más extensamente que lo que éste bloguero hubiera sospechado, tal como muestra la figura 1. O que hay gente que la visita desde lugares tan exóticos como Tuxtla Gutiérrez (México), Talca (Chile), Ashburn (Virginia, Estados Unidos), Kuala Lumpur (Malaysia), Seúl (República de Korea), Nadinah (Arabia Saudí) o Baila Mono (Panamá), que aparecen marcados con sus puntitos amarillos en la figura 2. Es verdad que ninguno de estos visitantes ha parado en la bitácora mucho tiempo (la figura 3 demuestra que el porcentaje de usuarios recurrentes del blog es bastante bajo), pero hace ilusión.
Seguiré atento a la evolución de los análisis de Google Analytics. Y en cuanto tenga tiempo y ganas (y la versión del sitio web sobre Joomla en perfecto estado de revista), añadiré a mi perfil la supervisión del tráfico de Lengua en Secundaria.
Alejandro Valero dice
Eduardo, lo de los usuarios recurrentes no te lo creas, porque ni Google ni Dios pueden saber qué usuarios vuelven al cabo de un tiempo. Por ejemplo, yo te leo todos tus artículos, pero cada vez uso una IPE distinta, pues ya son pocos los usuarios con IPE fija, afortunadamente, porque si no, tendríamos una matrícula en la frente que nos impediría pasar inadvertidos. Y no hay otra manera de identificarte si no es por la IPE, que yo sepa. Los usuarios recurrentes que aparecen en esta analítica son los que vuelven a tu blog mientras tengan la misma IPE, es decir, mientras no hayan salido de su última conexión a internet. Si no es así, que alguien me corrija en los comentarios.
En cuanto a los usuarios de países exóticos, podrían ser personas que han tecleado en Google algo así como «tortilla de patata» u otra cosa, da igual lo que sea, porque de los buscadores recibirás un montón de gente casi por azar. Esto es lo malo de las búsquedas actuales, a la espera de que la Web semántica se vaya imponiendo y las búsquedas puedan ser más precisas.
Eduardo Larequi dice
Gracias por las aclaraciones respecto a la IP, Alejandro. No se me había ocurrido pensar en el asunto de las conexiones con IP dinámica, pero tienes toda la razón. Y, por supuesto, muchísimas gracias por la fidelidad.
En cuanto a las procedencias exóticas, seguramente es verdad lo que dices, pero me consta que tengo visitantes que me leen desde allende los mares. Hace poco, a propósito del tema que utilizo para la bitácora (Tarski), me escribió un amable lector desde Argentina.
Francisco Muñoz de la Peña dice
Incluso te leemos desde sitios tan raros como Almendralejo.
Saludos de Paco
Eduardo Larequi dice
Una localidad que no conozco, Paco, a pesar de que durante la primavera pasada hicimos un largo recorrido por gran parte de Extremadura. Pero Almendralejo lo dejamos de lado… Cuando vuelva a tu tierra, que siempre me encanta, prometo enmendar el error.
corsaria dice
Mmm, me llama la atención lo de Google Analitys. Tenía la impresión, quizás errónea, de que ese sistema hacía más lento los blogs. No obstante el tuyo encuentro que siempre me carga muy rápido.
Yo uso statcounter, que si bien es limitado en cuanto a los informes que da (sólo los últimos 100 visitantes en su versión gratuita) me funciona bien. A veces me gustaría tener algo más completo. Habrá que estudiar el servicio de google que mencionas. :-)
Eduardo Larequi dice
Seguro que tienes razón, Corsaria, pues el plugin de Google Analytics para WordPress añade código JavaScript, que naturalmente ha de ser interpretado por el navegador.
De hecho, en los últimos días he tenido algún problemilla con el proveedor de alojamiento, por exceso de uso de CPU del servidor, que a lo mejor tiene que ver con las virguerías que hace Google. No se me había ocurrido la posibilidad antes de leer tus comentario (éste y el que has escrito a la entrada sobre Bookmarks), así que te los agradezco por partida doble.