Estoy acabando de redactar un artículo sobre propuestas de integración curricular de las Tecnologías de la Información y la Comunicación en el área de Lengua Castellana y Literatura; el artículo se me resiste (y por ello me he ausentado del blog en los últimos días), entre otras razones porque no me resulta fácil encontrar el tono justo para conciliar los aspectos propiamente curriculares con los inevitables detalles técnicos.
En fin, son neuras mías con las que no quiero aburrir a la concurrencia. Lo importante es que, mientras preparaba el artículo, me he vuelto a dar de bruces con un problema que he padecido alguna vez en mis carnes de profesor o ponente cuando he intentado acceder a un recurso que exige mucho de la conexión a Internet: por ejemplo, un vídeo en streaming o los más modestos (y ahora extendidísimos) vídeos en Flash. Ya sabemos por experiencia lo que ocurre cuando la conexión se atasca o no progresa a la velocidad adecuada: cortes, saltos, desesperación del docente y, seguramente, rechifla de los alumnos.
El usuario experimentado en Internet conoce el truco del almendruco para evitar estos momentos de angustia: utilizar un gestor de descargas o un webripper (una utilidad que descarga un sitio web completo) para grabar, con tiempo y calma, los vídeos que interesan o incluso el sitio en su totalidad, a fin de disponer en local de los elementos más sensibles a los cortes de conexión.
Ahora bien, ¿qué ocurre si el sitio web ha sido cuidadosamente elaborado para impedir que este tipo de programas consigan sus propósitos? Bien, siempre puede echarse mano de algún programa especializado en descarga de elementos multimedia (hace poco descubrí Orbit, y ya no puedo vivir sin él), o utilizar Firefox y cualquiera de las extensiones (véase el artículo Flash Video: cómo guardar los vídeos de YouTube, donde se recomiendan unas cuantas) desarrolladas con el propósito específico de descargar vídeos cuyos enlaces no son evidentes.
Estos recursos son útiles siempre que uno no se encuentre, como me ha pasado a mí esta tarde, con un sitio web realizado íntegramente en Flash, en el que resulta imposible utilizar el botón derecho del ratón o las funciones de las mencionadas extensiones. Para tal caso, hay una solución drástica, que consiste en recuperar los vídeos a partir de la caché del navegador Firefox, mediante uno de los trucos («Cached Files») que describe Koroush Ghazi en su completísima guía Firefox Tweak Guide – Page 7. Customizing Firefox.
Se trata de localizar el directorio de la caché del navegador, que reside en la siguiente ubicación:
- En Windows XP: \Documents and Settings\[nombre_usuario]\Configuración local\Datos de programa\Mozilla\Firefox\Profiles\[nombre_del_perfil]\Cache.
- En Windows Vista: \Usuarios\[nombre_usuario]\AppData\Local\Mozilla\Firefox\Profiles\[nombre_del_perfil]\Cache.
Si accedemos a estas rutas, veremos un montón de ficheros imposibles de identificar. En efecto, por motivos de seguridad, Firefox almacena los archivos de la caché en forma de cadenas alfanuméricas cuyos nombres no son transparentes. Así pues, si se quiere comprobar el contenido de la caché, hay que escribir en la barra de dirección del navegador lo siguiente: about:cache?device=disk
y pulsar la tecla Intro. Todos los elementos guardados en la caché se verán entonces como enlaces; cuando se pulsa sobre uno de ellos, el navegador muestra los detalles, incluido el tamaño del archivo, su nombre y ruta de ubicación en el disco duro («file on disk») [Víctor Gutiérrez, en el comentario que figura más abajo, señala que esto a veces no funciona, y tiene toda la razón].
Basta, pues, con copiar la ruta que corresponde al archivo que queremos salvar (si la caché es grande, puede costar un buen rato identificar cuál es el archivo que se busca) en la barra de direcciones del navegador y pulsar de nuevo Intro para que aparezca el cuadro de diálogo de abrir o guardar un archivo; entonces hay que seleccionar la segunda opción («guardar en disco») y, en su caso, la ubicación donde deseamos archivarlo. Una vez descargado, habrá que renombrarlo con la extensión apropiada (.FLV en mi caso, pues lo que intentaba conseguir era un vídeo en Flash), y listo. Ya sólo queda reproducir el archivo con cualquier reproductor multimedia que soporte vídeo en Flash; por ejemplo, con el prodigioso VLC Media Player, que es uno de los programas más útiles que pueda desear cualquier usuario, en casi cualquier sistema operativo; yo lo uso continuamente en Windows y en Linux.
El procedimiento tiene algunos puntos oscuros sobre los que conviene advertir. En primer lugar, su legalidad es cuando menos dudosa, ya que supone un medio extraordinario de recuperar un archivo cuyo creador desea ver protegido de apropiaciones indebidas. En todo caso, si el objetivo de esta acción fuera exclusivamente el de acceder a un recurso didáctico imposible de conseguir «en vivo», a causa de una conexión de insuficiente ancho de banda o latencia excesiva, yo estaría dispuesto a batirme el cobre por defender su legitimidad. Por otra parte, hay que estar seguro de que el archivo que se recupera es realmente lo que dice ser. Si se tratara de un spyware, un troyano o un pedazo de código malicioso, podríamos comprometer la seguridad del equipo, así que no está de más pasarle el antivirus y los antispyware que tengamos a mano antes de ejecutarlo.
¿Alguien se atreve a intentarlo? Reto a los valientes a que prueben sus recién adquiridas habilidades con otro vídeo de la adorable Deborah Kerr, esta vez perteneciente a Tú y yo (An Affair to Remember, 1957), de Leo McCarey. Aquí la Kerr sólo habla (por cierto, con una dicción impecable), porque, según he leído en la IMDB, la voz de la cantante corresponde a Marnie Nixon, una especialista en números musicales que intervino en películas tan famosas como My Fair Lady, Sonrisas y lágrimas, El rey y yo, West Side Story o Mary Poppins.
Adenda de las 22,30 horas
Pues vaya, mi gozo en un pozo: el truco de la caché del navegador no funciona con los vídeos de YouTube, que por lo que parece utiliza algún mecanismo que impide que sean cacheados por el navegador. Sin embargo, hay una solución alternativa, que se describe en PHP Youtube Video Downloader: como todos los vídeos de YouTube son cacheados por Google, basta con invocar la ruta http://cache.googlevideo.com/get_video?video_id=xxxxxxxxxx,
donde «xxxxxxxxxx» corresponde al código con que YouTube identifica un vídeo en concreto, para que el navegador devuelva un archivo llamado «get_video». Cuando finaliza la descarga, le ponemos la extensión .FLV, y el vídeo al morral.
Lu dice
La descarga de vídeos de uso educativo es necesaria, pues la Red es inestable y lo que hoy está accesible mañana ha desaparecido. Yo, consciente de mis escasos conocimientos sobre lenguajes encriptados y códigos extraños, uso herramientas de descarga más sencillas.
Ésta por ejemplo: http://keepvid.com/
O la que se explica en este post:
http://pizarricadigital.blogspot.com/2007/09/bajar-vdeos-de-youtube.html
Tus informaciones vienen a completar mis conocimientos.
Eduardo Larequi dice
Gracias por los apuntes, Lu. El problema es que las técnicas que se describen en los dos sitios sólo valen para vídeos cuyas URLs se conocen. Si la página oculta el código HTML y las direcciones de los enlaces, hay que acudir a otras estrategias más sofisticadas.
Víctor dice
Hola Eduardo,
He estado leyendo tu articulo y me he puesto a comprobar el contenido de la caché en Firefox, con la línea que comentas desde el navegador, pero al pinchar en el enlace denominado Key en la relación, no me da ninguna información en el campo «file on disk» casi siempre con el valor «none».
Esta explicación no la entiendo:
«Basta, pues, con copiar la ruta que corresponde al archivo que queremos salvar en la barra de direcciones del navegador (si la caché es grande, puede costar un buen rato identificar cuál es el archivo que se busca) y pulsar de nuevo Intro para activar el gestor de descargas de Firefox.»
no consigues activar el gestor de descargas, sólo que aparezca el objeto, pero despues tendrás que pinchar sobre él con el botón secundario y pinchar en guardar imagen, etc……., no sé si me explico.
Por cierto, me encargo de cambiar las fotos en la home del Portal de Empleo de Navarra, si tienes alguna de personas trabajando, si no te importa me las envias, en baja resolución.
Eduardo Larequi dice
Efectivamente, si el valor es «none», no puede haber ninguna ruta por copiar. A juzgar por las pruebas que yo he hecho, no todos los archivos que se muestran en la página «about:cache?device=disk» aparecen luego con su ruta, pero algunos sí. En este último caso, hay que copiar la ruta local del archivo en la barra de direcciones del navegador y darle a Intro, con lo cual aparecerá el cuadro de diálogo de Firefox de abrir un archivo o guardarlo en disco. Si se selecciona la segunda opción («guardar en disco»), lo salvará. Entonces podremos renombrarlo y ponerle la extensión que convenga.
En todo caso, tienes razón en tu observación, Víctor. Voy a cambiar el texto del artículo, porque es confuso.
Eduardo Larequi dice
Si quieres fotos de gente trabajando, te aconsejo que las busques en FlickrCC, que es un servicio que permite conseguir fotos de Flickr con licencias Creative Commons que permiten su libre difusión. Hay un enorme catálogo de archivos gráficos a tu disposición. Prueba a buscar fotos con las etiquetas «trabajador», «trabajando», «trabajo», «obrero», etc.
Y ya me contarás.
Víctor dice
Hola Eduardo, (si es posible no cuelgues esto en el blog)
Ayer tuve una discursión con un amigo sobre la forma en que trabajan los navegadores, el me comentaba que no almacena nada en HD, yo le rebatia lo contrario que lo almacena todo en la caché del navagador, osea en HD.
No tienes más que visitar una página con fotos, por ejemplo:
http://www.elpais.com y después ir a Opciones de interner -> Archivos temporales:Configuración–>Ver archivos, ordenar por Fecha y ver las fotos de la portada de El País en la caché.
Lo que no tengo tan claro es cuando pinchas para ver un video Flash que es lo que pasa, si lo carga en caché o no, ya me dirás.
En cuanto a FickrCC darte las gracias y reconocer que en un buen banco de imagenes, por cierto ya he colocado unas cuantas en la home del Portal de Empleo, muchas gracias.
Un abrazo,